...
el amanecer despacio,
la luna llena todas las noches.
El grito seco del que no tiene nada más que decir,
la risa del loco,
la luz entrando por una ventana,
la ventaja de seguir vivos,
el olor a la café de mañana,
la ropa recién lavada,
el sonido de un consejo,
el olor de una flor que nadie corto,
la caricia del viento las noches de frío.
Pero creo que solo pediría que
todo cambie y todo permanezca
en la medida que me a mi me apetezca.
Y ojala nunca nos den el remedio,
ni nos quiten el mareo de las cien mil vueltas al
mundo sin movernos del sitio.
Que
jamás nos puedan cortar alas,
que no las vean siquiera.
Que
sean silenciosos y ciegos peatones
que andan mirando al suelo
y no se deslumbren
por que pintemos las paredes
con frases de locos enamorados.
Que
no nos den ni un suspiro, ni una tregua.
Que
los lunes sean MIS LUNES
y los viernes NUESTROS.
De todos.
Que
nos los merecemos.
Y
ojala empieces la semana con una sonrisa
y la termines con una doble.
Otra
cerveza por favor
que me estoy endulzando la vida.
Ojala
nadie lo entienda.
Nadie,
nadie.
Porque
el día que lo entiendan estaremos perdidos.
Dejaremos
de ser dos locos
que se creen diferentes
para formar parte de ese mar gris,
de rostros grises y de gabardinas grises,
que dicen, creen y piensan lo que deben.
Que
no me quiten nunca la locura,
ni la ternura,
ni la posibilidad de refugiarme en
un abrazo,
ni el sentimiento que le pongo a lo que amo,
ni la seriedad con la
que me enfrento al mismo muro cada día.
QUE
JAMÁS NOS QUITEN LA ILUSIÓN.
Que
no tengan el valor.
Hope.
Creo
que es mi palabra favorita del inglés.
Cuatro
letras que lo saben recoger todo en dos silabas,
una palabra.
Un
sentimiento.
Espero
que al menos una vez en tu vida sepas lo que es recibir un portazo en plena
cara.
Porque así sabrás que al menos fuiste, y lo intentaste.
También
espero que otras muchas te abran la puerta
y te den un beso en los labios.
Una vez yo tuve un sueño,
consistía en ir saltando de invierno en invierno,
pero me perdía demasiadas sonrisas
y no te creas que recibí muchos abrazos
Así que asumí que a veces eso de saltarse cosas no es tan buena idea,
que era mejor vivirlo todo.
Sufrirlo todo.
Amarlo todo también.
Renuevate esa cara, que estas lleno de cicatrices.
Y respira hondo,
como cuando se sale a un escenario.
Que no hay escenario mas grande y mas imprevisible que la vida.
Pero en esto también estamos juntos,
así que no puede ser tan difícil
¿no crees?