lunes, 30 de septiembre de 2013

A veces para ver es necesario abrir los ojos, querido.

Desde que tengo uso de razón veo como la gente se golpea una y otra vez con el mismo obstáculo.

Y yo,
como no,
la primera.

Y si hablamos en primera persona dire, que no notas el dolor. Al menos las primeras veces.

Como con las heridas superficiales, hasta que no sangra no es grave.
Pero un moratón también duele.
Un moratón quiere decir que sangramos, por dentro...

Como cuando nos callamos las cosas hasta que nos acaban arañando por dentro, intentando salir, huir de nosotros.

Omitir información también es doler, es no saber que decir, ni como, ni porque.
Es alejarse.
No decir que quieres a alguien también es distancia...

No saber si quieres a alguien, en cambio es una putada.

La gente tiene miedo de hablar.

Parece que nadie esta dispuesto a arriesgar el pellejo por nada y menos por nadie.

Valientes.

Debería buscar esas narices que le echaba antes a todo.

Demostrarle al mundo que seguimos siendo grandes. Que no hay golpe tan grande ni dolor tan fuerte. Que esto no acaba aqui.

Nunca acabará aquí.

Porque "aqui" no es ninguna parte, es solo una estupida forma de decir que ahora tenemos impulso, que retrocedimos para coger carrerilla.

¿Ya tienes suficiente?

Yo hace tiempo que si.

Y sigues riendo.

Y sigues haciendo esas cosas cotidianas.
Como poner cinco minutos mas en el despertador o tomarte ese café.

Y nadie se da cuenta de que te estas curando por dentro, que ya no quedan casi cicatrices.

Vas a comerte el mundo.

Solo te queda creerlo.

Que yo, de siempre, he creido en ti.

No existe lo insignificante

Helado de dulce de leche.
Café con hielo.
Gotitas de lluvia contra el crital.
Jerséis de punto.
Besos de buenos dias.
Miradas de deseo.
Risas de tarde,
o de cualquier hora.
Amigos.
Llegar cinco minutos antes.
Sentarte en el césped.
Mirar las estrellas.
El chocolate negro.
...
Cosas que nos hacen sentir bien.
De esas que te sacan una sonrisa.

A veces es tan fácil como comer un helado o tan complicado como intentar ver las estrellas desde esta maldita ciudad.
¿Quien no daria algo por un respiro?

Ver el mar.
Descalzarse.
Andar por la arena.
Mojarte los pies.
Sonreír.

Desde Madrid no se puede. No hay estrellas ni mar. Sera esto un amor irracional.

Sera quizá conformismo o mero cansancio.

Porque no abrir la caja de los recuerdos y sacar cualquier tiket de compra que nos dibuje una sonrisa y salir a delante.
Una vez más.
Que ya caímos demasiadas veces.

Busco razones, coherentes, a veces.

Me doy contra un muro imaginario y me echo a reir.

¿Dónde ha quedado el sentido común?

¿Y las ganas de seguir luchando?

Sobre esas nubes que no nos dejan ver las estrellas. Creo.

viernes, 20 de septiembre de 2013

Insomnio de miedos futuros

Creo que llevar analizandolo todo durante toda la vida me ha hecho crear mil ideas propias.
Cosas como que cuando tienes un dia terrible y empieza a llover deberiamos salir a la calle.

Empaparnos.

La lluvia limpia el ambiente ¿porqué no a nosotros?

También convivo con un montón de miedos, supongo que tu también.

Miedos creados a fuego lento a lo largo de los años, miedo a la caida. Que no a las alturas, si no a la posibilidad de volver al suelo de un golpe.

Vértigo.

Llevado a todos los ámbitos. Si.

Pero creo que lo que mas miedo me da es el no saber que opciones tengo mañana.

Que lo que yo no quiero es levantarme una mañana, mirarme al espejo, y darme cuenta de que me conformé.

Que yo tenia mil oportunidades y todo el tiempo del mundo, y lo pase pensando y haciendo tonterias.

Que no ame lo suficiente, que no me levante tantas veces como fue necesario, que jamas terminé nada, que no fui capaz de retener a nadie en el otro lado de la cama.

No se.

Quizas sea uno de esos miedos irracionales que vamos creando con los años.

O que vea que le gente deja de tener objetivos.

De perseguir sueños.

De lograr metas.

Y yo. Yo solo quiero levantarme todos los días de mi vida sabiendo perfectamente, no que pasara a lo largo del dia, si no que, pase lo que pase llegué donde quería y me dirijo a donde deseo.

Feliz noche.

jueves, 19 de septiembre de 2013

Volver a un lugar que sigue igual para ver lo que en uno mismo ha cambiado. O eso dicen

Que no daria yo por una buena noche estrellada, de esas de abrazarte a la chaqueta,  no creas que pido poco.

Que mi cabeza siempre tiende a desvariar mas de la cuenta y aqui nadie tiene las pelotas de pedirle que afloje.

Pido una de esas noches de silencio, de escuchar, de sentir que hasta el viento tiene otra textura, de esas que te hacen creer que serias capaz de enamorarte del primero que pase. Por tonto que suene.

Porque solo estas enamorada de ese olor a frio y a lejos.

De ese olor a puto fin del mundo.

No sabes de que hablo. Lógico. Ese sitio esta bien reservado. No sea que alguien más se enamore de él y me deje sin mi trocito de cielo, sin sueños de pajaro, sin miedo de crios bajando una montaña.

Un lugar asi te hace creer que aún quedan cosas buenas en la vida.
Que se siguen guardando secretos.
Que se siguen cumpliendo promesas.
Que se sigue besando en vivo y en directo, en mitad de cualquier cuidad.
Cortando en tráfico por hacerlo en un semáforo en verde.

¿Tu tienes un lugar asi?

Un sitio donde las posibilidades de éxito sean infinitas.

Un bar, una terraza, una cama, un ...

Un mundo a parte. Donde creer en cuentos y gritar hasta dejar allí toda esa sensación de mal estar.

Yo necesito volver.

Y gritar.

Dejarme la voz.

En ese sol.

En esa paz.

En ese color naranja del que espera a que caiga la tarde y ve alejarse al sol.

Dime ¿cuantas veces viste amanecer desde cualquier ciudad? ¿ático? ¿ventana? ¿colchón? o ¿brazos?

Y dime... ¿No lo echas de menos?

miércoles, 18 de septiembre de 2013

Todo seria diferente si tomásemos los consejos que damos.


Que dados somos a dar consejos, a coger el teléfono sin problema y decir un montón de cosas, que tienen muchísimo sentido y que sabemos que es lo correcto.

Damos consejos a todas horas y sobre mil cosas.

Consejos sobre como actuar en situaciones comprometidas, porque sabemos, pensando siempre con la mente fría, que es lo que hay que hacer.

Perfecto.

Maravilloso.

¿Y luego que?

Te lo diré.

Cuando somos nosotros los que nos vemos inmersos en esas situaciones de mierda. Porque toda situación que nos cree dudas es una mierda. No sabemos que hacer. O perdón. Si lo sabemos, pero no tenemos el valor. O que coño, los cojones de hacerlo. De lanzarnos. De tener la mas mínima opción de hostia.

Por que nadie en este mundo quiere pasarlo mal. Nadie quiere despertar del sueño, de la idea que se ha creado.

Cuando pensamos en algo importante durante un tiempo, corremos el riesgo de crear expectativas que quizás, solo quizás, no se cumplan. Creemos que si tenemos el valor de hacer algo todo sera diferente, que si cambiamos una cosa pequeñita todo se reorganizara solo, como por arte de magia.

Pero no, o si. Quien sabe. Porque nadie lo sabe, porque en el momento en que desechaste tu idea o pensaste que "joder era muy difícil" o "imposible" o "por que yo" o todas esas tonterías que pensamos para no hacer algo, todas esas malditas escusas, estamos perdiendo la capacidad de saber que hubiese pasado si.

Y si...
...y si...

Una vez mas la coletilla. ¿Veis como es una mierda?

Una vez escribí que si siempre haces lo que te hace feliz jamas querrás rebobinar. 

Así que doy el consejo, para mi la primera, porque soy la que mas necesita decirse a si misma que posiblemente arriesgarse si es la mejor opción.

ADELANTE.


Y que no importa si me doy contra un muro o si no esta todo bajo control o si sale mal.
Por que las cosas tiene que salir mal, no podemos seguir viviendo en un mundo en el que esperar que todo salga bien, a veces cuando haces algo que no es lo correcto encuentras un camino que te lleve a lo que si que lo es.

Porque no existe nada mas correcto que lo que te hace feliz.

Si no nos empezamos a convencer a nosotros mismos de que estamos preparados para luchar por nuestros sueños por muy absurdos, irreales, lejanos e imposibles que nos parezcan, nadie va a luchar por nosotros.

Hace tiempo escuche un vídeo que decía "A ver, ¿cuanta gente que ha tenido éxito ha sido realista?"

Ninguna. En serio pensadlo bien.

Asi que recojamos todo ese valor que tenemos dentro y demos un paso hacia delante.

Un paso hacia donde realmente queremos estar.


Que se que todos sus caminos le llevaran a Roma.

Creo que el principal problema es que no se contar con exactitud la cantidad de veces que me ha levantado del suelo, que no, que posiblemente jamas seré capaz de saber en que momento del camino se convirtió en una hermana.

No lo se.
Pero, sinceramente no me preocupa.

Creo que en verdad nunca sabemos como de importante llegara a ser nadie en nuestra vida, pero que si tenemos el tiempo suficiente, si invertimos veinte segundos mas, quizás encontremos alguien que en verdad merezca la pena.

Y no se muy bien como es posible que me haga pensar que puedo hacer todo aquello que me proponga, aunque cuando luego lo vuelva a pensar en frió, yo me convezca a mi misma de que no. De que no seré capaz o que no estoy preparada.

Y ojala sepas lo que es saber que siempre habrá alguien a ese lado del camino que no vemos normalmente, ese lugar que esta justo a nuestra izquierda, o a nuestra derecha y que no solemos mirar. Porque estamos pendientes de no caer con esa piedra, una vez mas.
Pero no importa que caigamos.
Ella esta al otro lado de mis cosas para darme un grito y ayudarme a continuar el camino con mas fuerzas de las que empece.

Y no es fácil, o si.

Es un poco aterrador.

Saber que tienes tanto y que puede perderse da un miedo increíble.

Pero una vez me dijeron que si daba miedo es porque era importante.

IMPRESCINDIBLE.
Esa es la palabra.

Ojala jamas deje de preguntarse cosas, de preguntármelas a mi. Cosas como "¿crees que alguien puede cambiar por amor?" que me dejen totalmente descolocada y me hagan pensar, que quizas si, que aunque piense que estoy equivocada al pensar que el amor es como una ola brutal y que nos puede ahogar, ella también es un poco romántica. 
Y cabezota
E indecisa
Y fuerte
Y débil

Y mi mejor amiga por encima de todo.

Y se que cuando gane un Oscar me lo dedicara a mi.

Pero yo se que sabe que cuando decida echarle un pulso a la vida,
yo seguiré apostando por ella.



sábado, 14 de septiembre de 2013

Creo en un amor rompe-muros, cruza-mares

Yo he visto amor en estado puro.

Lo juro.

Y creo firmemente en su existencia, por una vez en el amor no es cuestión de fe.
Lo he visto. Se que esta ahi afuera esperando que una tarde cualquiera estemos dispuestos a abrir los ojos y, lo que es mas importante, el corazón.

Me gusto mucho una frase que lei hace poco que decia "pasara el amor de mi vida delante de mis ojos y yo estaré mirando tu última conexión del WhatsApp"

Supongo que solo es una forma moderna de decir que a veces malgastamos un tiempo maravilloso en gente que no es la adecuada.

A veces incluso creemos en las segundas oportunidades.

Idiotas.

Yo creo que todos merecemos un amor que se salga de las estadísticas, un amor que en definitiva nos lleve al límite. Al puto punto de no saber que esta bien o que esta mal pero que no nos importe.

Un amor, señores, que se amolde a nuestra vida, que se cuente en buenos momentos, que ahuyente despedidas, que atraiga besos y se caliente en abrazos.

Un amor sin complicaciones, joder. De esos que atraen sonrisas y en los que las discusiones solo sirvan para poder reconciliarse.

Pido un amor equitativo, sincero, pleno y confiado. Un hombre que entienda mis mil manías y que espere que yo le quiera tal y como es.

Y pido también que tu, tengas un amor a tu medida. Con el porcentaje justo. Porque se que existe una persona. Bueno tres al menos. Que pueden llevarte al cielo. Prometido. Solo debes dar con una y disfrutar.

Y creo firmemente también, en la existencia de un lugar al que llamar hogar. Aunque este alojado en un pecho o una espalda, incluso entre unos brazos.

Yo lo busco.

Aunque el amor esta en todas partes.

Busco el mio propio.

Poco a poco.

Aun me aterra encontrarlo cruzando en rojo algun semáforo.

Pero si, yo lo he visto.

Lo he vivido.

Lo veo flotar en una noche sin estrellas.

Y se que algún dia estare preparada.

Y jamás te entristezcas por no querer a alguien.

Que el estar triste en esta vida, y mas por un sin-amor es la cosa mas ridicula de este mundo.

Disfruta.

miércoles, 4 de septiembre de 2013

Cuando ni la linea recta es la distancia más corta entre dos puntos. Perdido.

Tomas esa curva, interminable, que en el fondo no es más que la rotonda en la que se ha convertido tu vida.
Cuando avanzas dos pasos vuelves al principio, a ese jodido principio que tanto odiamos todos. Incluido tu.
Siempre te rodeaste de gente que preguntaba ¿porqué no?
Gente que creíste que estarian cuando la curva fuese un poco mas pronunciada. Y te equivocaste.
En realidad llevas tiempo haciendolo.
Vivir no es fácil.
Cierto.
Pero a veces las curvas, ni siquiera las rectas nos llevan al lugar adecuado.
A veces desearia no ir a ninguna parte.
Tener tiempo de sobra para sentarme y mirar al rededor.
Ya no nos queda tiempo para ello, lo invertimos en tecnología que algún dia nos facilitara la vida. Pero hoy no.
Hoy eres tu, y estas solo, buscando una salida pero siguiendo el mismo camino.
Si girases la vista y observases la cantidad de gente que dejaste en la acera.
Gente que si estaba dispuesta a darlo todo por ti.
Te diste cuenta tarde, o en verdad demasiado pronto y aun no sabes que es lo que sucede en realidad.
Jamás nadie debería mendigar nada, ni amor, ni amistad, ni comida, ni siquiera unas tristes monedas.
Y tu lo estas haciendo sin saber ni el por qué.
Mantienes la mirada fija y pretendes ver a quienes estan a los lados.
Y es imposible.

Elegir un camino y ser fiel a el no es sencillo y tu no estas preparado para el camino que esperan.

lunes, 2 de septiembre de 2013

Entenderme a mi siempre fue tarea de varios dias... o más

Buscaria una razón para explicarte porque escribo, pero se que no la encontraría.
A veces hablo por mi, otras muchas por otros, por completos desconocidos.
Gente que se cruza en un paso de peatones mirando el suelo mientras piensa porque el amor de su vida se fue tan lejos o quizás solo porque el asfalto es de color negro.

Me inspira la gente que me rodea y el recuerdo de un mar que me robo el corazón aun antes de ser consciente de nada.
Y hablo de sentimientos.
De el amor sobretodo, porque creo que no existe nada mas aterrador ni nada mas fuerte en infinito a la redonda.
O si no dime ¿acaso existe algo mas poderoso que el amor de una madre mientras abraza a su hijo?
Nunca he visto, quizas también porque aún me quede mucho que ver, nada más valioso, ni nada que mueva mas cosas sin siquiera verse.
Otras veces hablo de la lluvia, (sonrio inevitablemente), todos hablamos de trivialidades de vez en cuando.
Pero en verdad es que pienso que la lluvia nos hace un poco libres.
Supongo que llega y se lleva todas esas cosas a las que no nos aferramos con suficiente fuerza.
Así que si realmente quieres algo abrazalo antes de que se escape.
Nunca abrazamos a la persona que queremos suficientes veces.
Me gusta el invierno, es una bonita epoca para tomar cafe caliente y acurrucarse.
La gente dice que odian el frio y la lluvia, ¡ja!, solo lo odian si estan solos.
Puede que escriba por placer o solo porque me sale, porque se que alguna vez alguien estara al otro lado y sabra perfectamente de que hablo.
Y se sentira bien.
O mas perdido.
Pero bueno hace falta perderse para encontrase.
¿No?
Brinda siempre por los comiezos y si no duele por los finales

La radio haciendo de las suyas una vez más

Sonreí escuchando la frase "y aqui quien no es cobarde por amor" en la radio, en una de esas canciones que te sabes de seguido sin haber pasado ni un segundo intentando aprenderla.
A veces las cosas son asi de sencillas.
En el amor parece que no, por eso somos cobardes, por eso buscamos comodines y redes que nos protejan del mayor golpe de nuestras vidas.
Pero quizás el golpe no sea realmente tan grande, es decir, si es la persona adecuada no se convierte en golpe. Se convierte en red.
El problema quizá venga entonces por el miedo al conformismo o a no tener la opcion de elegir.
Una vez escuche que no hay nada que cabree mas al ser humano que quedarse sin opciones.
Pero en el fondo rara vez elegimos lo que deseamos, estamos tan influenciados por el entorno que olvidamos hasta nuestros propios gustos.
Pero estábamos hablando de cobardes, de gente como tu o como yo que siempre han creido que saltarían al precipicio pero a la hora de la verdad solo miran al fondo, y lo ven negro, muy negro.
Que hay que estar muy loco, o muy enamorado, que quizas sea un poco lo mismo para darlo todo por alguien.
Y nunca llega esa persona perfecta, porque ni siquiera existe.
Hablaba hoy con una persona importante y me decia "nadie es perfecto".
No podía quitarle la razón.
La tenia.
Pero también es cierto que aunque la perfección no exista todos tenemos la idea d ello en la cabeza, y bajo mi punto de vista es una de esas cosas que te hace levantarte por la mañana. Ser un poquito mejor digo.
No se, creo que como le dije a ella normalmente en la vida luchamos por cosas imposibles o quizas poco probables y que precisamente es ahí donde esta la gracia.
En lo invencible que te sientes al lograrlo.
Así que puede que con el amor debamos hacer lo mismo, dejar de ser cobardes, de ser unos completos idiotas y vendarnos lo ojos de vez cuando.
Y nunca dejarnos caer, si no tirarnos convencidos de que esa persona sera la adecuada y se convertirá en red.
Porque esa es la magia de la que hablaban los cuentos de princesas en realidad.
No se trata de varitas magicas. Se trata de confiar tanto en una persona que ser cobarde por amor suene totalmente ridículo.

domingo, 1 de septiembre de 2013

Septiembre infinito

Una vez mas termina el verano, el sol, las largas horas muertas, la lectura ligera, los botellines helados de cerveza, el pincho de tortilla,  los calamares de chiringuito. Se acaba lo bueno dicen.
Yo siempre preferi septiembre, esa sensación de que todo vuelve a tomar el ritmo correcto, el frenesí, la vuelta a un mundo que, aun en septiembre creemos que puede ser mejor.
Una vez mas me encuentro adorando cosas que, creo que nadie mas soporta.
Adoro esa ultima quincena de calor,  cuando las tiendas se llenan de chaquetas de punto y botas altas, cuando el marron invade el paisaje y las hojas de los árboles caen como presagiando que pronto llegara el frio invierno.
Es el momento en que descubrimos cuan débiles son los amores de verano y nos juramos una vez mas, en vano claro, que al año siguiente sera distinto, que no volveremos a tropezar sobre esa piedra de ojos calidos.
Ilusos.
Pero tambien es el momento de los reencuentros, cuando pasan tres meses y vuelves a ver esos otros ojos que te hacen olvidar medio verano.
Porque ese es septiembre en todo su esplendor, dejando que todo siga su curso, dandonos la oportunidad de elegir porque luchar.
Es el mes de la esperanza, cuando todo nos parece posible, de los buenos propósitos, de abrazos de reencuentro.
Cuando el frio llega para dejarnos helados y pedir calor en brazos de aquel que nos estaba esperando.