Una oportunidad perdida de antemano es como un beso inesperado, una canción en la radio local de una ciudad que no es ta tuya. El frenesí y el impacto de una vida que jamás seremos capaces de controlar. Gracias, de antemano.
Porque son ellas las que nos demuestran que seguimos vivos. Que fue real. Que lo lograste.