Como cuando tiras una moneda al aire en un burdo intento de tomar una decisión.
Creo que es una de esas cosas estúpidas que hacemos los humanos cuando creemos no saber que deseamos realmente.
Pero si lo sabemos.
Dicen que si llegas al instante en que has agotado todas las opciones y decides, tontamente, jugártela a cara o cruz, existe una milésima de segundo justo después de darle una opción a cara y otra a cruz, una vez has tirado la moneda al aire en la que de manera inconsciente sabemos que opción deseamos.
Es como si nuestra cabeza de pronto dijese cara.
Seguro que te ha pasado.
Si sale cara, sonríes, todo ello es inconsciente pero la suerte te ha sonreído y tu simplemente le devuelves la sonrisa.
Si sale cruz, posiblemente intentes tirar de nuevo la moneda al aire o quizás prefieras resignarte.
Creo que yo solo podría darte un consejo.
Lanza la moneda pero no mires si es cara o cruz, porque en el fondo, tu ya sabes que deseas.
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